Nissan ha comunicado oficialmente el cierre de su planta de Barcelona mediante una llamada de su consejero delegado a la ministra de Industria. Los tres centros -Zona Franca, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca- se cerrarán en diciembre pero se mantendrán las operaciones del grupo en Ávila y Cantabria no se verán afectadas.
Las factorías barcelonesas dan trabajo a unas 3.000 personas, pero generan cerca de 30.000 empleos directos e indirectos.
La fábrica de Zona Franca -la más importante- ha ido perdiendo carga de trabajo de manera paulatina en el último año, lo que llevó ya a finales de 2019 a plantear un ERE con 600 prejubilaciones, mientras que la planta trabajaba por debajo del 30 % de su capacidad
El Gobierno ha lamentado la decisión de la compañia japonesa y ha propuesto crear un grupo de trabajo para estudiar escenarios alternativos que garanticen la continuidad de la actividad industrial. Sostiene que es posible mantenerla con el plan de viabilidad que se presentó hace meses., mientras que el líder de la oposición acusa a Sánchez de engañar a los empleados de Nissan.
Cerrar cuesta más de 1.000 millones
Industria señala que una vez conocida la decisión, que le fue comunicada oficialmente esta mañana con una llamada telefónica del primer ejecutivo de la compañía Makoto Uchida a Reyes Maroto, se inicia un periodo de negociaciones en el que se establecerán los plazos y las condiciones del proceso.
Industria insiste en que la continuidad de la fábrica barcelonesa tiene sentido económico para Nissan Motor, «al ser más rentable invertir que asumir el coste del cierre, que podría superar los 1.000 millones de euros». «La planta de Barcelona tiene carácter estratégico, ya que abandonar España es abandonar la UE, con el consiguiente coste reputacional en un mercado de más de 500 millones de habitantes», añade el comunicado.
La vicepresidenta económica, Nadia Calviño, subraya que siguen las negociaciones: «Hemos propuesto a la empresa un proceso de negociación (…) las inversiones necesarias a la planta son inferiores al coste estimado de cerrarla. Vamos a seguir trabajando con la empresa, la Generalitat, el Ayuntamiento, sindicatos… para ver cómo encauzar ese proceso o buscar una solución alternativa».
La ministra de Exteriores reitera la necesidad de conservar «ese saber hacer de una historia de más de 40 años de especializacion de conocimientos que queremos mantener y preservar» «Me da la impresión de que Nissan tiene un plan que significa recentralizar actividades independientemente de los planes que los gobiernos europeos puedan ofrecer» e insiste en «buscar una situación alternativa».
Consultas con los sindicatos
A partir de ahora, se abre un período de consultas con los sindicatos para pactar las condiciones de salida de los cerca de 3.000 trabajadores que componen la plantilla, una negociación que pilotará Frank Torres, vicepresidente ejecutivo en Rusia y ex máximo responsable de Nissan en España. Torres también asumirá la responsabilidad de todas las operaciones industriales en España, relevando así a Genís Alonso.
La multinacional mantendrá Nissan Iberia como organización comercial, de ventas y marketing en España junto a la red de concesionarios para poder atender a los clientes de la marca. La compañía nipona recuerda que «España siempre ha sido, y sigue siendo, uno de los mercados más importantes para la marca en Europa».
El consejero delegado, Makoto Uchida, ha asegurado que la decisión de cerrar las plantas de Barcelona se ha tomado tras «un extenso estudio para mitigar el exceso de capacidad de producción y mejorar la competitividad general».
El presidente de Nissan Europa, Gianluca de Ficchy, se ha comprometido a «debatir el plan con total transparencia y respeto para todos los empleados» y a «escuchar las opiniones de los representantes de la plantilla, los empleados «y todos nuestros socios en Cataluña y en toda España».
Movilizaciones
Los trabajadores de Nissan mantienen una huelga indefinida desde el 4 de mayo, cuando la multinacional había previsto reiniciar la actividad tras el parón debido al coronavirus, por lo que el paro ha acabado por estrangular la producción. Este miércoles protestaron ante la sede de la Unión Europea y el consulado de Japón en la capital catalana. Los empleados se movilizan esta mañana en respuesta al cierre.
El posible cierre de Nissan en Barcelona afectará a más de 3.000 trabajadores directos y 20.000 indirectos
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ya defendió la permanencia de la planta en Barcelona y aseguró que «Nissan ha recibido ayudas durante muchos años, tiene una responsabilidad con sus trabajadores y con el territorio«,
Colau: «Nissan ha recibido ayudas durante muchos años, tiene una responsabilidad con sus trabajadores y con el territorio»
El Gobierno de España convocará en los próximos días a la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona, el Consorcio Zona Franca y llos sindicatos para analizar conjuntamente la situación y estudiar diferentes escenarios de futuro.
